Muy requete buenos días!
Mirad qué rapidito nos plantamos en el miércoles. Una de las mejores cosas que tiene trabajar con peques es que sabes cómo son, me explico: conoces de antemano cuáles serán sus reacciones y no tienen cien estados de ánimo como tenemos los adultos (alegría, ansiedad, pena, preocupación, nervios, apatía…). Ellos están contentos o enfadados. Al entrar por la puerta de la clase sabes que te sonreirán y se alegrarán de verte y la regañina del día anterior ya es agua pasada. Se quedan con lo importante: que los cuidas, les enseñas y que los quieres.
Pero volviendo al tema del post, hoy os enseño los productos que utilizo para alisar el pelo en casa. Por supuesto la plancha del pelo (la mía es de la marca Artero y de cerámica, algo muy importante para no dañarlo más de la cuenta), un protector del calor (para aplicarlo antes de utilizar el secador o la plancha), un cepillo de pala redonda y unas pinzas.
En la época de la lactancia veía vídeos en YouTube sobre maquillaje y belleza . Cuando leía títulos como “alisar tu pelo con la plancha” no comprendía qué misterio podía tener una operación tan sencilla… Pero como la lactancia da para mucho, llegue a tragarme uno de esos vídeos y me sorprendió ver que al repetir la “técnica” que utilizaba la chica el resultado era mucho mejor.
Antes lo que yo hacia era soltarme el pelo y pasar la plancha repetidamente por todas las zonas, hasta que el pelo quedaba plano. Al cambiar el modo de uso de la plancha es cierto que invierto algo más de tiempo pero es más natural el resultado. Tienes que recoger todo el cabello arriba, sujetándolo con unas pinzas y dejar caer sólo la capa más baja (la más cercana al cuello). Una vez alisada sueltas la siguiente capa. Notas una gran diferencia al planchar cada capa por separado, el pelo queda mucho más suelto, como si fuera realmente liso y no como sí hubieras planchado el cabello sobre la tabla de la plancha (lo he probado y queda el pelo en bloque, pegado 😉 ).
Me despido con un beso grande amigas! Feliz día!