Periquitas!!!
Ya os comenté en algún post anterior que no soy partidaria de los labios pegajosos y brillantes que dejan los gloss. Por eso, si en alguna ocasión decido aplicar un toque en el centro de los labios para darles volumen, “necesito” que el brillo este en buen estado. La mejor forma de recuperar un gloss seco y pastoso es meterlo en un vaso de agua caliente durante 2 o 3 minutos. No se os ocurra meterlo en el microondas pues el plástico de estos productos no esta preparado y podría provocar un “beauty-desastre” dentro.
Ya veréis cómo después de pasar vuestro tubo de brillo por el baño María el producto queda más fluido y menos pastoso. Este truco ayuda a aprovechar más los labiales líquidos que quedan en las paredes cuando se están acabando.
Pasad un buen día y hacérselo pasar a quienes os acompañen hoy! See you tomorrow!