¡Qué sencillo es “ser hombre”!
Hablo desde la observación y el análisis de la especie masculina. Viendo a mi marido, mi padre, mis hermanos y mis amigos, me atrevo a afirmar que son realmente descomplicados en su manera de funcionar y entender la vida. En las relaciones sociales, tratan a amigos y familia con naturalidad y franqueza, sin reparar en segundas lecturas en las conversaciones. Cuando acuden a una celebración sólo deben decidirse entre el traje gris o el azul (la corbata la elegimos nosotras). Ellos simplifican los problemas, buscan soluciones eficaces y simples. Si tienes un problema con una amiga, él te dirá que lo arregles, “dile lo que te enfadó”. Ellos buscan resolver el conflicto y no comprender los sentimientos y circunstancias que pudiera haber detrás.
Sin enrollarme más, hoy quería deciros que encuentro necesaria y bonita la complementariedad entre hombre y mujer. La sencillez y prácticidad de él y la complejidad y sensibilidad de ella, hacen que el resultado de la ecuación sea perfecto. Nosotras taparemos las canas con tintes y mechas que resalten la elegancia de una mujer que madura, ellos se verán estupendos con canas en el pelo. Soy capaz de distinguir un cabello masculino teñido a cien metros de distancia, me resulta artificial, al igual que los peluquines. Comprendo que a ellos también les cuesta trabajo envejecer, verse perder pelo, pero el encanto varonil creo que está en la naturalidad con la que ven la vida llegar, también en la madurez. Mirad a Richard Gere, Harrison Ford o George Clooney, las canas les suman y no les restan atractivo. No critico a los señores que se tapan las canas, pero desde aquí los animo a aceptarlas y verlas como una medalla que el tiempo les otorga y que puede hacerles verse interesantes.
Disfrutemos todos de la vida con naturalidad y positivismo!! “La cana” es bella!!! 😉
Soy maestra de Primaria en una escuela sevillana.
Además realicé el máster de maquillaje del Teatro Quintero, con Juan Pedro Hernández Revenga, y el maquillaje es mi gran pasión.