Os traigo malas noticias… “Los tacones son perjudiciales para nuestra salud”. Seguro que ya lo sabíais, y si no lo habéis leído en algún artículo de medicina/salud, seguro que vuestros pobres pies os lo han gritado alguna vez: socorro!!! Este dolor en los dedillos es insoportable!! Bájate de ahí!! Ponte unas babuchas!!
Pues sí, los podólogos nos recomiendan que utilicemos un tacón que no supere los tres centímetros y que sea ancho (cubriendo todo el talón).
Andar con tacones nos obliga a desplazar el peso del cuerpo hacia adelante, por lo que son los dedos del pie y el empeine los que soportan todo el peso del cuerpo. Por eso se nos hinchan y molestan los pies, porque el peso no se reparte a lo largo de toda la superficie. En la medida en que castiguemos a nuestros pies, podremos sufrir en el futuro trastornos en los huesos como juanetes, dedos de martillo… Estos problemas se derivan de un desplazamiento de los huesos de los dedos hacia fuera debido a la sobrecarga.
El abuso de zapatos de tacón también perjudica a nuestras rodillas y esto puede ser el detonante de un desgaste de esta articulación que derive en una artrosis prematura.
Ya sabéis que si queréis ser coquetas toda la vida y lucir unos pies y rodillas sanas debéis cuidar y estudiar el tipo de calzado asesino que usáis. Dándole a vuestros pies un descanso, utilizando tacones razonables y no durante demasiadas horas.
Si hoy viernes decidís subiros a vuestros tacones, sed prudentes y no corráis.