Ya sabéis que el pasado sábado 22 estrenamos estación: llegó el otoño!!
No sé si os pasa a vosotras, que, aunque el cuerpo te pide descansar del sofocante calor que hemos pasado este verano, el otoño se os hace algo duro… Los días nublados y lluviosos y el frío repentino que todavía nos coge por sorpresa en sandalias. Es tan fácil vestirse en verano…con un vestido de hilo y unas sandalias o unos vaqueros y una t-shirt divertida, nos arreglamos en dos minutos… El otoño creo es una etapa de transición entre el verano y el invierno, nos ayuda a cambiar el ritmo biológico (de sueño, comidas…) que teníamos en la estación del calor y los interminables días, a la temporada de frío y jornadas cortas. Si disfrutamos de la vida como Dios manda, y nos presentamos ante cada día, cada estación con ojos de admiración ante lo bueno que se nos presenta, podremos valorar detalles que a veces pasan desapercibidos. Los colores vivos del otoño, la melancolía y el romanticismo de los parques en ésta época, los frutos secos de temporada o la liga de fútbol que vuelve con Bale y Neymar y las polémicas conversaciones en la oficina ;)…
En fín, que estamos en un momento de cambios y si prestásteis un poco de atención al cepillo del pelo, al desagüe de la ducha o a la almohada, veréis que vuestro cabello también se cae en mayor cantidad. Si consiguiéramos oír lo que nuestra melena grita desaforadamente cuando llega el otoño, escucharíamos a nuestro pelo vociferar como soldados bien instruidos la frase : “RENOVARSE O MORIRRR”!!!!!! El cabello se renueva poco a poco y siempre tenemos entre un 12 y un 15% en proceso de renovación, esto evita las calvas localizadas. El pelo que ahora se nos cae, en realidad murió en primavera, pero tarda unos tres meses en caer (la raíz del pelo está a medio centímetro por debajo de la piel). Así, en cuatro años habremos mudado tooda la cabellera. Los dermatólogos a los que he leído insisten en que no debemos preocuparnos pues no estamos perdiendo pelo sino renovándolo. Recomiendan una buena alimentación variada y sana (de productos naturales) como ayuda en lugar de los suplementos vitamínicos. Es un proceso natural del cuerpo, recordad que por coquetas que seamos, en realidad somos mamíferos que tenemos un “pelaje” que renovar.
En éste día tan otoñal que nos han regalado, os mando un besote a tooodas!! Renovarse o morir!!
Soy maestra de Primaria en una escuela sevillana.
Además realicé el máster de maquillaje del Teatro Quintero, con Juan Pedro Hernández Revenga, y el maquillaje es mi gran pasión.